Los últimos datos oficializados de producción de gas y petróleo en el país mantuvieron para la Cuenca Neuquina de Río Negro y Neuquén una estabilidad en la extracción de gas y una caída en los volúmenes de crudo, que comenzó a impactar sobre las regalía que reciben las provincias.

Los valores de gas se mantuvieron casi sin alteraciones, en la comparación anual de marzo del 2017en Neuquén (+1,9%) y en Río Negro (+0,7%). No obstante, el alerta se encendió en la producción de petróleo, atravesada por una crisis internacional de preciosy un esquema nacional tendiente a eliminar los beneficios de incentivo a la producción local.

Según datos relevados por el Instituto Argentino del Petróleo y el Gas (IAPG) en el tercer mes de 2017 las cuencas argentinas produjeron 484,5 mil barriles diarios. La cifra representó una caída del 8% (36,9 mil barriles/día menos).

A las variables vinculadas al estancamiento del precio internacional, se sumó además una retracción en la economía general que empujó hacia abajo la demanda del combustible procesado en las refinerías, principalmente el gasoil.

Para las provincias de la cuenca el panorama parece más complicado. En Río Negro la extracción de crudo cayó por encima de la media nacional: 10%, mientras que en Neuquén la merma fue de 4,8%. El territorio neuquino depende más del gas que del crudo, pero en la cuenta final de las regalías esa caída afecta a las arcas provinciales

Las dos provincias vieron pasar, en la comparación anual, unos 250 mil barriles menos en el mes. Este volumen representó un resta en las regalías de 25,6 millones de pesos, algo que si se anualiza puede terminar en un dolor de cabeza para los ingresos locales, consigna una nota publicada por el diario “Río Negro”.

En la práctica, para la administración de Río Negro significó una baja de 10,8 millones de pesos y para Neuquén unos 14,8 millones de pesos menos.