Luego de la firma del acuerdo que sellaron el martes 2 de febrero la Nación, los gremios, las operadoras y empresas de servicios de no realizar despidos por 90 días y rotar al personal, se analiza de qué manera se implementarán las suspensiones en el sector petrolero.

Desde la Cámara de Empresas Proveedoras de Servicios Petroleros (CEOPE) se afirmó que la suspensión de personal en los yacimiento, debido a la paralización de equipos de perforación, dependerá de los diagramas de trabajo y de cómo opera cada compañía, ya que será distinto para los equipos de perforación, los trabajos de work over o los de inyección de productos químicos.

"Lo que se establece con la rotación es que haya gente que entre y salga del procedimiento preventivo de crisis, debe ser gente con las mismas características o destrezas", señaló Adolfo Sánchez Zinny, presidente de esa cámara.

Sánchez Zinny agregó que no hay número establecido de suspensiones. "Depende de cada empresa, ya que son ellas las que las van a aplicar. Hay 21 equipos parados de perforación y eso involucra una dotación directa de 40 cada uno y 80 indirectas que son de compañías de servicios. De ahí viene el número aproximado de 2000 o más personas, pero no es algo firme, puede ser menos y variable en el tiempo también", explicó.

Zinny indicó que los yacimientos no tienen rentabilidad, pese a la fijación de un precio diferencial para el barril de crudo interno, de 67,5 dólares en el caso del Medanito de Neuquén.

El titular de la CEOPE dijo que la industria argentina en general perdió competitividad en los últimos 20 años. "Esto por muchas razones que no son solamente el tipo de cambio ni las dotaciones excesivas de personal, también factores internos como la logística. Es toda una estructura de costos que perdió competitividad. Por eso, aún con el barril criollo hay yacimientos que no pueden operar de manera rentable", aseguró Zinny en declaraciones radiales.

El titular de la CEOPE, que participó de la firma del convenio en Buenos Aires, precisó que la subvención no es una solución para encarar este tema. "Pasar de más de 100 dólares a 30 es una diferencia muy importante y por eso la intervención en su momento del Gobierno. Pero nosotros lo que nos tenemos que sacar es el andador o las muletas, pensamos siempre en que alguien nos ayude para tapar lo que tenemos que resolver nosotros", apuntó.

Respecto del acuerdo, Zinny valoró la apertura al diálogo y el arribo a una solución en el marco de la ley de contratos de trabajo. También la posibilidad de atenuar el impacto social de la crisis por la baja internacional del petróleo, contrario a lo que pasó en otras partes del mundo, donde ya se contabiliza, por efecto de esta situación, la pérdida de 350.000 puestos de trabajo.