En diversos punto de la provincia, el crecimiento de las zonas urbanas han avanzado hacia zonas productivas y desde la provincia se estudia la posibilidad de regular la situación.

El subsecretario de Ambiente de Neuquén, Ricardo Esquivel, indicó a la prensa que su cartera trabajará este año en "lograr un consenso con los municipios para que el desarrollo urbano se lleve a cabo sin avanzar sobre las zonas de actividad hidrocarburífera". Una vez logrado los puntos de acuerdo, se presentará en la Legislatura un proyecto ley.

El funcionario admitió que en caso de aprobarse la norma, "es muy posible que haya que reubicar los asentamientos ilegales que están próximos a los pozos".

Desde la Legislatura, los diputados se mostraron dispuestos a discutir esta iniciativa. "Sería una buena idea buscar una solución para poner límites entre los pozos y las urbanizaciones", señaló Luis Sapag, diputado del MPN al diario LM Neuquén.

Su colega de Libres del Sur, Jesús Escobar, precisó que "no hay ningún proyecto en la legislatura para regular esta situación". "Este año deberíamos poder darnos el tiempo para discutir esta temática", dijo y también solicitó prohibir el fracking dentro de las zonas urbanas.

En el interior de la provincia, el caso no es muy diferente. En Rincón de los Sauces, el jefe comunal Marcelo Rucci ve con "preocupación" el avance de su ciudad hacia el yacimiento Medanito. "Aunque todavía tenemos espacio para seguir creciendo, por el momento estamos viendo cómo actuar", reconoció.

En Plottier, el Código de Planeamiento Urbano "le pone límites al avance de la producción petrolera sobra la ciudad", indicó e Andrés Peressini. Entre otras cosas, dispone que no se puede perforar ningún pozo a menos de 170 metros de cualquier zona residencial. Además, obliga "a las petroleras a tener responsabilidad social empresaria y dejar algo que beneficie a los vecinos".

En Neuquén capital, donde el barrio Valentina Rural Norte ya tiene casas que están separadas por una medianera con un equipo de bombeo, se está trabajando en la creación de un marco regulatorio, el cual podría ser tratado por el Deliberante antes de fin de 2016.

Hasta tanto, una comisión de expertos en derecho y medioambiente estableció una serie de recomendaciones que se les exige a todos los desarrollos urbanos que se proyecten en ese sector, como la presentación "de planes de contingencia avalados por la petrolera", "dejar una zona de resguardo" por seguridad, permitir la producción y forestar para "mitigar la contaminación auditiva".