San Patricio del Chañar, un tranquilo pueblo frutícola dedicado a la industria de los vinos, vive desde hace años un crecimiento sostenido con la explosión de Vaca Muerta, notándose paulatinamente un crecimiento de su población.

Hoy se encuentra desbordado, con falta de bancos en las escuelas. Su intendente Ramón Soto remarcó su preocupación por el fenómeno que están viviendo y aseguró que ya se reunió con los directivos de los establecimientos educativos de la ciudad, ante el reclamo de los padres, muchos de ellos nativos y otros recién llegados a los nuevos loteos que tiene la ciudad.

En estos años, en San Patricio del Chañar se entregaron poco más de 1500 lotes, entre ellos los sociales, que en su momento vendió entre 6 y 15 mil pesos; más los del mercado inmobiliario, capitalizado por ASPA SRL.

En aquellos lotes que en su momento se vendieron en 2008 hoy se construyen casas, y muchas familias se radicaron en la ciudad atraídas por el trabajo en los yacimientos, cerca de Añelo.

En la localidad hay tres escuelas primarias, la 191, 273 y 342, más los jardines de infantes y otro colegio secundario. El problema está en primaria, donde ya anunciaron que el año que viene faltarán bancos si no se construyen nuevas aulas, por la llegada de alumnos a la ciudad.

Según datos de la Dirección de Censos y Estadísticas de Neuquén, San Patricio del Chañar tiene una proyección de crecimiento del 53% desde 2010 a 2016. Pasará de 7457 a 11.432 habitantes. Sin embargo, los números no tuvieron en cuenta el fenómeno petrolero.

Lo cierto, es que el crecimiento poblacional sostenido desde año 2001 al 2010 fue de 47% y por el impacto de Vaca Muerta se incrementó su población un 53% en tan solo cinco años.

Fuente diario Río Negro