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Cruzar de Río Negro a Neuquén es una tortura diaria con lentos y estrictos controles en los puentes interprovinciales

Poco personal y equipamiento, solo dos equipos para leer QR y dos pistolas por puente, para verificar a absolutamente todos los automovilistas, ciclistas y transeúntes, se hace insostenible cruzar a los trabajadores esenciales, con demoras cercanas a las 3 horas.
Darío Hernán Irigaray
Por Darío Hernán Irigaray

“Cada vez me levanto más temprano y no hay manera”, contaba Juan a Vaca Muerta News, un residente de Cipolletti, que todos los días cruza a la provincia de Neuquén a realizar sus tareas esenciales en la industria petrolera.

Cruzar desde la vecina provincia de Río Negro a Neuquén ha pasado a ser un martirio, específicamente por dos factores, el poco equipamiento y personal para controlar y las personas que no tienen su autorización a mano, impresa o en su celular, para que pueda ser tomado y verificado su código QR de autorización ágilmente.

Más de un vehículo se lo ve pegar la vuelta, luego de transitar varias horas por no poder demostrar la documentación correspondiente.

“Estoy llegando tarde, a pesar de haber salido temprano, con más de 3 kilómetros de cola recorrida. Salí de casa a las 6 de la mañana, recién ingreso a Neuquén a las 9, es una locura”, contaba a Vaca Muerta News Mariano, quien trabaja en una compañía de servicios petroleros.

Es normal se trasladen pacientes en ambulancias entre ambas provincias, y hoy deben transitar por medio de una extensa maraña de vehículos, donde abrir paso por el puente se ha hecho una tarea difícil. “A veces llegan en contramano por el puente viejo, vemos de cortar el tráfico, en coordinación con la policía de Río Negro”, nos contaba uno de los oficiales apostados en el puente, del lado neuquino.

La realidad, que la situación se ha hecho insostenible, y se pide a las autoridades de la provincia de Neuquén que se pongan a la altura de las circunstancias, por la escasa cantidad de personal y equipamiento, no solo de la policía provincial, si no también personal municipal.

Nadie niega que los controles son sumamente necesarios, pero es importante darle más agilidad, porque son miles las personas que viven en la provincia de Río Negro, no solo en ciudades como Cipolletti, si no Cinco Saltos, Fernández Oro, Allen, General Roca, entre otras, que viajan a diario a la capital neuquina y zonas de influencia.

Para descomprimir esta situación y agilizar, se abrió el puente que une la ciudad de Centenario, en Neuquén, con la vecina localidad de Cinco Saltos, en Río Negro, aunque de no tener mayores equipos para controlar los códigos QR, también ocurrirán demoras.

Se espera que se sumen más equipos en los próximos días para agilizar el tránsito sin dejar de lado el estricto control, ya que se siguen sumando casos en la provincia de Río Negro en los últimos días, lo que probablemente haga que se extienda más allá del 5 de junio los dispositivos actuales.

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