El gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez afirmó el lunes 13 de abril que por la caída del mercado interno, producto de la pandemia del coronavirus, "la demanda de crudo no debe superar los 200.000 barriles" diarios de producción en el país, trazando un complicado panorama que afecta a las provincias petroleras y las principales empresas del sector.

Gutiérrez al mismo tiempo afirmó que el gobierno nacional, las provincias y las compañías del sector, vienen trabajando en un "acuerdo amplio" para dar respuestas y tratar de contener los efectos de la crisis de la industria hidrocarburífera.

En este sentido, uno de los frentes que preocupa es el laboral. El sindicato petrolero que conduce Guillermo Pereyra se encuentra negociando con las petroleras las condiciones laborales y salariales de unos 20.000 empleados. Están en sus hogares por las medidas adoptadas para evitar contagios de coronavirus en yacimientos neuquinos. La baja en la producción de crudo por el derrumbe de la demanda interna es otro factor adicional que pone en riesgo sus fuentes laborales.

“El mundo esta en crisis, hay una crisis sanitaria, económica y social de la cual no escapa Vaca Muerta. Hay una confrontación internacional por el precio del barril. Estamos trabajando junto a los sindicatos, los gobiernos provinciales que están en la Ofephi (estados provinciales productores) para tomar medidas”, afirmó Gutiérrez en un diálogo radial con el periodista Luis Novaresio.

Ante una pregunta, el gobernador neuquino consideró que "paralizado" no es el término para definir el ritmo de producción del shale en este momento. Dijo que los nuevos desarrollos se encuentran "stand by", y que es "imperioso reactivar el mercado en la medida que se active la demanda". Afirmó que una vez culminada la actual etapa de crisis "se va a poder reactivar la producción rápidamente", publicó LM Neuquén.

Cabe recordar que Neuquén, junto con el resto de las provincias petroleras vienen solicitando al gobierno nacional la autorización de un precio sostén para el barril petrolero en Argentina. Se espera que esté por encima del precio del crudo Brent, de referencia para el mercado argentino.

En la actualidad, la cotización se encuentra en 31 dólares y las provincias petroleras quieren que se contemple un precio en torno a los 50 dólares. De este modo, podrían sostener una parte del nivel de recaudación, dado que obtienen en concepto de regalías el 13 por ciento de la producción en sus áreas.