El secretario general del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa, Guillermo Pereyra, analizó la situación energética en Argentina. Destacó los alcances logrados con el gobierno de Mauricio Macri en el inicio de su gestión, pero lamentó las decisiones tomadas después del 11 de agosto, que derivaron en un virtual freno a las inversiones para Vaca Muerta.

En un contexto con 527 despidos en conciliación obligatoria y a la espera de la designación del equipo de la Secretaría de Energía del presidente Alberto Fernández, que asumirá el 10 de diciembre, Pereyra hizo un panorama de lo realizado en los últimos cuatro años.
“Veníamos muy bien, entre los gremios que componemos Vaca Muerta, que son la UOCRA, Camioneros, Petroleros Jerárquicos, el nuestro, junto al personal propio de las empresas, habíamos alcanzado la cifra de 35.000 compañeros trabajando”, evaluó. “Pero, luego de las PASO, a partir del resultado adverso para el gobierno nacional, con el Decreto 566, cambiaron todas las reglas de juego. Puso un tipo de cambio a $43 por dólar, cuando ya en ese momento estaba casi en 60 y un precio tope del barril de crudo y ante este cambio, se empezaron a retirar las inversiones”, analizó.

“Ya se han bajado 17 equipos de perforación y atrás de los equipos, se caen los puestos de trabajo, los insumos para la fractura hidráulica como la arena, el agua y debido a este efecto dominó, estamos muy preocupados”, agregó en declaraciones televisivas al programa “Minuto Uno” que se emitió el martes 3 de diciembre por el canal C5N.

“A partir de allí, comenzamos a tener comenzamos a tener suspensiones, con 1600 compañeros suspendidos en sus tareas, en forma rotativa, a veces acordada y en otras no. De repente nos encontramos con 527 despidos. Y con la conciliación ocurrió algo raro. Habíamos declarado un paro de actividades, pero el miércoles (27 de noviembre) nos dictan la conciliación obligatoria ese mismo día, pero la comunican con una foto por WhatsApp, cuando la ley de procedimiento administrativo, dice que debe ser con una comunicación fehaciente, con copia certificada, que debe ser entregada a las partes, para que se acate la conciliación”, dijo.

“Lógicamente, la organización gremial no dio crédito a esa foto y las actividades se pararon hasta las 8 de la mañana, cuando recién nos notificaron. Esto fue una maniobra, que no fijó la fecha de la próxima reunión, es patear la pelota hacia adelante y se las arregle el gobierno que viene. Son presiones que se trasladan hacia adelante y hay una situación difícil, pero todos debemos acordar en una mesa, donde intervenga el gobierno nacional, las organizaciones sindicales, las empresas, el gobierno de la provincia, para ver dónde estamos parados y adónde vamos”, afirmó.

Por otra parte, Pereyra confirmó que ha tomado contactos con funcionarios del presidente electo, Alberto Fernández. “Hay que esperar a los nuevos funcionarios. Nosotros no esperamos que el día 11 de diciembre esté todo arreglado. Comenzaremos una etapa de diálogo que nos llevará dos o tres meses, pero mientras tanto, las empresas, que no despidan compañeros”, reclamó el dirigente gremial.

Vaca Muerta y la infraestructura
El secretario general del sindicato de Petróleo y Gas Privado resaltó el nivel de actividad en Vaca Muerta hasta agosto y recordó que faltarán obras de infraestructura cuando se retome la actividad. “Hay que trabajar mucho, con esto que es Vaca Muerta. Estamos en un cuello de botella. Nosotros tenemos en un yacimiento 122 pozos improductivos, listos para poner en producción, pero estamos en un cuello de botella. En el caso del gas, no se ha construido el gasoducto a San Nicolás y si no se hacen rápido las obras de infraestructura, vamos a tener problemas”, afirmó.

“Se termina en dos años el contrato con Bolivia y no construimos el gasoducto a San Nicolás que va a reemplazar esa importación de gas. No contamos tampoco con la planta de licuafacción del puerto de Bahía Blanca. ¿Qué vamos a hacer con el gas”?, se preguntó el dirigente gremial.

“Y algo similar ocurre con el petróleo, donde los oleoductos están al tope y estamos en condiciones de exportar petróleo a Chile por el gasoducto trasandino, pero hay que repararlo y no se ha hecho nada”, advirtió.

Reglas claras. Pereyra reiteró la necesidad de que haya reglas claras de inversión para Vaca Muerta. “Los dólares que necesitamos van a llegar en la medida que haya seguridad jurídica, previsibilidad. Si no damos esas garantías de previsibilidad a las empresas, no van a invertir en Argentina y nos vamos a quedar con el gas, el petróleo sin desarrollar y sin trabajo, sin la generación de divisas que necesitamos los argentinos”, afirmó.

Consultado sobre cómo califica el gobierno de Macri, Pereyra dijo que “en nuestra actividad tuvimos bien articulada el tema de la adenda (convenio de trabajo para la explotación de los no convencionales en Vaca Muerta), pero en la última etapa, pasó lo que pasó y no soy quién para calificar. Pero esto nos sorprendió porque esto destrozó todo lo que habíamos construido”, señaló Pereyra.

Por último, el dirigente gremial agregó que el gobernador de Neuquén, Omar Gutiérrez, ya ha mantenido contactos con el equipo de Alberto Fernández para tratar la situación actual y acelerar la reactivación en la formación neuquina.