La explotación no convencional de hidrocarburos en Vaca Muerta no deja de marcar récords de producción y elevan la producción nacional. Según datos de la Secretaría de Energía de la Nación, en el mes de agosto, el país produjo unos 590.973 barriles diarios, de los cuales casi la mitad provino de Neuquén y más del 40% fueron fueron de Vaca Muerta.
Para que el país supere la barrera de los 600.000 barriles, son necesarios entre 6 y 8 nuevos pozos que sumarían unos 10.000 barriles diarios. Llegar a esta marca, según fuentes de la industria, puede ser posible si se tiene en cuenta la calidad geológica, el diseño de pozos, y el momento en el que comienzan a operar, ya que, como se sabe, el declino de producción es rápido, precisa la nota del diario “Río Negro”.
En este marco, no sería difícil alcanzar esta producción diaria pero sí mantenerla en el tiempo, algo que sólo se logra con más pozos. Para ello, es necesario tener en cuenta también la capacidad de procesamiento y transporte disponible, que en la actualidad no sobra en la formación.
Si se repasan algunos números, el petróleo de Vaca Muerta creció un 55% en un año y se pasó de los 157.000 barriles a los 244.000 el mes pasado. No obstante, este aumento de la producción tiene como contrapartida la declinación en los pozos convencionales. Vaca Muerta sumó 87.000 barriles en un año, mientras que la provincia unos 79.500 barriles de promedio.
Si se analizan los datos de producción en el país, la producción shale de Vaca Muerta produjo más del 47% de los barriles de petróleo del país en agosto y mes a mes la provincia de Neuquén se consolida como el motor energético de Argentina.
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