A comienzos de mayo se exceptuó de las actividades del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio a las construcciones privadas, que retomaron paulatinamente sus trabajos.

Desde que hace cuatro semanas la Municipalidad puso en marcha la gestión electrónica de permisos de obra, recibió más de 1.300 solicitudes de las cuales habilitó 502 entre edificios y construcciones privadas de mediana y pequeña magnitud.

“En el contexto COVID-19, desde nuestro mosaico de los desarrollos inmobiliarios, hemos podido poner en funcionamiento las obras desde hace dos semanas, cuando fuimos habilitados desde Nación y desde el municipio de Neuquén, obra por obra”, dijo a Vaca Muerta News Pablo Arpajou, representante de SAFIAR SRL, una empresa constructora y desarrolladora inmobiliaria dedicada a proyecto, ejecución y comercialización de emprendimientos inmobiliarios en la Ciudad de Neuquén. “En la actualidad estamos con seis obras en funcionamiento y cada obra cuenta con su respectivo protocolo sanitario”, agregó.

“En cuanto a la cantidad de operarios por obra, son alrededor de 15, por lo cual hay obras que están muy bien con la cantidad de gente y hay otras que están a la mitad o el 30% de lo que necesitamos para desarrollarla. Esto lleva a que se hace un sistema de programación obra por obra, tarea por tarea, recurso por recurso, para ser eficientes y llevar adelante los objetivos de cada emprendimiento”, precisó.

Arpajou destacó el trabajo de la constructora en este contexto de crisis. “La desarrolladora genera movimiento y valor agregado a la sociedad a través de la construcción y de los ladrillos. Por un lado, pensando que los ladrillos son en tiempo de crisis una manera de ahorrar y generar beneficios para el que tiene los fondos y por otro lado, generar miles y miles de puestos de trabajo para trabajadores, comercios e industrias que dependen de los bienes raíces”, dijo.

“En ese aspecto, hemos tomado ese tiempo con el concepto de que somos un barco que navega en aguas turbulentas y donde tenemos que, metafóricamente, ir despojándonos de aquellos pesos innecesarios que nos amarran a la ineficiencia, con un norte muy claro y decidido, que tiene como objetivo el estudio minucioso de los recursos y la eficiencia y mantenimiento de cada parte”, resaltó

“Por eso, estamos con un proceso de cuidar cada área de la empresa y transmitir la gratitud hacia aquellos que se han sumado a nuestras propuestas y queremos beneficiar a quienes apuestan a los bienes raíces y compartir con quien se asocia a nuestros emprendimientos”, indicó.

“Además estamos con el plan de mayor financiación en el mercado, de estirar el plazo de entrega de los emprendimientos, para lograr que más personas se puedan sumar a estos proyectos”, dijo.

“También contamos con un proceso de micro inversiones para darle valor a cada uno que tiene algún recurso, sea grande, mediano y chico. En este sentido, estamos pensando en conceptos colaborativos de empresas y asociativos con nuestra gente. La única manera de salir de esto, es con un objetivo firme sin perder recursos, ser eficientes y darle para adelante todos los días, no hay otra opción”, señaló Arpajou.

Consultado sobre la valorización de la moneda extranjera, dijo que “depende de cómo se está sincronizando el valor dólar con el metro cuadrado. Las propiedades en pesos suben por la devaluación. Algunos trabajan con un dólar billete y otros como dólar intermedio, un dólar ladrillo, que es el promedio entre el valor venta del dólar oficial y el valor venta del dólar blue. Ese es el valor que estamos tomando nosotros”, afirmó.

“Las propiedades en pesos suben día a día y en dólares se está ajustando, porque se ajusta el valor venta y costo de producción. Muchas de las variables están en pesos, como paritarias y otros materiales, mientras que un 30% de los materiales están ajustados a la valoración del dólar, en base al commoditie al cual responden, por ejemplo el hierro, acero, aluminio, grifería, cable y se ajustan en dólares, pero el 70% de las otras variables son por ajustes inflacionarios o paritarias”, explicó el desarrollador.

“Al margen de la negociación de los valores en dólares en metro cuadrado, la situación varía en Neuquén y en el país. Hay otros mercados, como el porteño, donde se trabaja solo en dólar billete. Más hacia el interior, es más federal y se extienden los valores en pesos. Nosotros trabajamos productos en dólares y en pesos”, dijo Arpajou.

“Es decir que se hacen procesos de financiación en pesos, ajustados por la Cámara de la Construcción, pero también se hacen procesos de financiación en dólares, si es necesario”, resumió.