Agregó que “en nuestro país, el Plan Gas.Ar nos defiende de la suba del precio internacional del GNL, pero debemos seguir transitando con inteligencia el camino de la transición energética, para no caer en esta mega crisis de un costo de la energía que sería impagable para la gente y ruinoso para la economía Nacional”.
Martínez aseveró que “el Plan Gas.Ar fue una decisión inteligente, y muy valiente, de Alberto y de Cristina, que dio previsibilidad a los productores tanto en volúmenes como en precios del gas en Argentina. Una previsibilidad que los países centrales hoy no tienen, y que los lleva a sufrir la volatilidad y la estampida del precio del Gas y el GNL, y la escasez del fluido, y que los arrastra a una crisis muy compleja, con aumentos descomunales de los costos de la energía eléctrica”.
“Pero el Plan Gas.Ar fue posible por la visión que tuvo Cristina, como Presidente, de tomar la decisión estratégica de desarrollar la explotación no convencional en Vaca Muerta, y hoy sus resultados están a la vista”, sostuvo.
Recordó que “cuando lanzamos el Plan Gas.Ar obtuvimos casi 70 Millones de M3 día de Gas Natural Argentino, a un precio de usd 3.50 para los próximos tres años”, y añadió que “hoy en el hemisferio Norte el GNL cuesta usd 29 el MMbtu, y esa decisión Inteligente de poner en marcha el Plan Gas.Ar nos ayuda a defendernos de esta crisis mundial.
“Los altos costos de los derechos de emisión de CO2, definidos en esos países, inclinan a la generación eléctrica hacia el Gas Natural o el GNL, y esa sobre demanda generalizada, hace ya explotar el precio de una oferta de gas que no responde, y también hace explotar el costo de la energía eléctrica con subas entre 100% y 300% en solo un año en Europa, Asia y USA. Y el equilibrio en el precio del gas y de la energía eléctrica, llegará cuando a las generadoras les sea indiferente pagar los derechos de emisión de CO2 o el precio que tenga el gas”, declaró Darío Martínez.
Señaló además que “este aumento monumental del costo de la energía, ya presagia para el invierno en esos países centrales, cortes a la Industria, problemas de abastecimiento a los hogares, problemas para calefaccionarse, y afectación general a la marcha de la economía”.
“Cuando en nuestro país el costo promedio anual ronda los u$d 60 el MWh, y en este invierno, en agosto, con consumo de Gas Oil, alcanzó los u$d 80 el Mwh, en Europa el precio de la energía está alcanzando los u$d 200 el Mwh, un nivel inalcanzable para Argentina, sin que ello genere una crisis económica, financiera y social de magnitudes desconocidas. Los subsidios eléctricos se dispararían hasta alcanzar los u$d 18.000 MM, y el costo de la energía a la Industria casi se cuadruplicaría, generando quiebras y parálisis de la actividad. Y si se pretendiera trasladar ese costo sideral a la gente, las facturas deberían multiplicarse por siete, consumiéndose gran parte de los ingresos de amplísimos sectores populares. Un verdadero imposible”, expresó el secretario de Energía.
Dijo también que “los argentinos debemos seguir transitando la transición Energética con inteligencia. Eso significa usar prioritariamente nuestro recurso más limpio y abundante que es el Gas Natural, significa no apurarnos a hacer o a alcanzar metas en tiempos imposibles para nuestras posibilidades financieras como país, para los bolsillos de nuestra gente y para los costos de la energía que requiere nuestra economía para desarrollarse”.
“Significa también usar la transición para desarrollar industria y tecnología Nacional de aerogeneradores y paneles solares, potenciar la utilización de motorizaciones a GNC y GNL producido en el país para el trasporte urbano de pasajeros, el de mercaderías por camiones y el fluvial”, añadió.
Señaló que “ser inteligente significa multiplicar la producción de Gas Natural que hoy pagamos usd 3.50 el MMbtu, y construir los gasoductos que hagan fluir esa producción hacia los centros de consumo para reemplazar la importación de Gas Oil a usd 16 el MMbtu que hoy queman nuestra centrales térmicas, y el GNL a usd 14 MMbtu (futuro mayo 2022) que aún debemos traer en invierno para completar el abastecimiento de nuestra demanda interna”.
Por último, dijo que “debemos seguir transitando la transición con nuestra propia estrategia y nuestros propios tiempos”.