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Marina Demaria, presidente del Colegio de Martilleros de Neuquén, expresó su firme rechazo a la desregulación del mercado inmobiliario.
Según Demaria, el mercado inmobiliario ya está desregulado, ya que no existe una obligatoriedad de contratar a un martillero para realizar operaciones inmobiliarias. "Hoy en día, puedes contratar a alguien profesional o no, o hacerlo por tu cuenta y no pasa nada. Ya estamos desregulados," afirmó.
Demaria explicó que la desregulación, presentada como una medida conveniente, en realidad desprotege a los usuarios y consumidores finales. Resaltó que la ley provincial 2538 de Neuquén regula la actividad, los honorarios y la ética profesional de los martilleros, además de establecer el Colegio de Martilleros, que supervisa las matrículas y puede intervenir en casos de mala praxis.
La presidenta del Colegio subrayó la importancia de la profesionalización y la capacitación continua para los martilleros, quienes trabajan con el patrimonio de las personas y necesitan actuar con seriedad y responsabilidad. "Nuestra ley no solo regula la actividad, sino que también protege a los consumidores y asegura la gobernabilidad de las matrículas de los martilleros," agregó.
En cuanto al impacto de la desregulación en Vaca Muerta, Demaria mencionó que la desregulación podría llevar a una falta de control en la fijación de precios, perjudicando tanto a compradores como a vendedores. También criticó el cobro excesivo de honorarios por parte de personas no capacitadas, conocidos como "dateros", que actualmente pueden cobrar hasta un 10% del valor total de la operación, muy por encima del 3% regulado para los martilleros.
Finalmente, Demaria destacó el papel fundamental del Colegio de Martilleros en la protección de los derechos de los usuarios y en el mantenimiento de la profesionalización del sector. "Estamos para garantizar la confianza y la seguridad jurídica que genera contratar a una inmobiliaria o a un martillero. La desregulación solo trae desprotección y desprofesionalización de nuestra carrera," concluyó.
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