Diversos sectores de la industria hidrocarburífera advirtieron sobre el riesgo de baja en la actividad en Vaca Muerta, ante la falta de insumos provenientes de la importación.
Una de las entidades que manifestó su preocupación fue la Federación de Cámaras del Sector Energético de la provincia de Neuquén (FECENE) se advirtió sobre las nuevas restricciones a las importaciones y se indicó que la organización viene recibiendo "de forma permanente pedidos desesperados por repuestos e insumos para Vaca Muerta".
Cabe recordar que la FENECE integra a la Cámara Patagónica de Empresas de Servicios Petroleros (CAPESPE), la Cámara de Empresas de la industria Petrolera y afines (CEIPA), la Asociación de Industriales de Neuquén (ADINEU), la Asociación del Comercio, Industria, Producción y Afines de Neuquén (ACIPAN), y la Cámara de la Construcción (delegación Neuquén).
"Todo se puso más crítico, en algún momento las SIRA salían rápido pero estas últimas dos semanas está complicadísimo", indicaron voceros de la entidad, en declaraciones reproducidas por IProfesional.
"En la actualidad existe una limitación con la cantidad de equipos de fractura y cuando se rompe algún equipo, a veces se desarma uno para mantener al resto, y esto lleva a situaciones bastante límite", añadieron.
En la actualidad, son ocho los equipos operativos en Vaca Muerta y un desarrollo masivo demandaría el funcionamiento de más de 30, algo imposible de cumplimentar ante la situación actual.
Por otra parte, empresas que prestan servicios a diferentes operadoras tuvieron la precaución de “stockearse” con productos importados, pero el peligro de falta de insumos es constante en Vaca Muerta.
Incluso desde el Sindicato de Petroleros Privados de Río Negro, Neuquén y La Pampa, se informó a través de sus representantes que los equipos de perforación aún en funcionamiento se ubican hasta dos tercios por debajo de lo requerido.
El gremio advirtió que, de no modificarse el escenario de faltantes de piezas, repuestos y maquinarias, la caída en la actividad en el reservorio podría comprometer el funcionamiento del gasoducto Néstor Kirchner.
Señaló, también, qué las inversiones del orden de los 8.000 millones de dólares quedarían en suspenso si no se flexibiliza el cepo a los productos industriales generados en el exterior.