En el año 2024 Argentina recuperará el superávit en su balanza comercial energética después de 14 años. Este logro será central para estabilizar la economía a mediano plazo y se alcanzó gracias a la puesta en marcha del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK) de Vaca Muerta en agosto del 2023.
Según un informe de la consultora Vectorial, publicado por Clarín, el diferencial entre exportaciones e importaciones de energía desde entonces fue positivo durante siete meses seguidos (agosto-febrero) por un total acumulado de 2.093 millones de dólares.
"Para encontrar otro período con superávit energético por 7 meses consecutivos hay que retrotraerse a mediados del 2010", valoró la consultora que dirige Eduardo Hecker, ex presidente del Banco Nación.
"Del total de US$ 2.236 millones de saldo comercial positivo acumulado en el primer bimestre, el rubro Combustibles explica US$ 948 millones, más del 42%. El desarrollo del sector energético lo transforma en clave para normalizar la estacionalidad de la oferta y demanda de dólares", amplía el informe.
El GNPK, o Gasoducto de Vaca Muerta, fue licitado a mediados del 2022 por Energía Argentina (Enarsa). Las constructoras Techint, Sacde y BTU lo hicieron en tiempo récord a un costo cercano a los US$ 2.500 millones y con financiamiento del Estado nacional, y con dinero de la recaudación de impuestos como el aporte de las grandes fortunas cobrado en 2021, la toma de deuda en pesos y la emisión monetaria.
En 2023 el resultado comercial energético fue negativo en US$ 600 millones. Este año habrá un cambio de signo y se volverá positivo en US$ 3.300 millones, según las estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI). Y hacia 2030, el balance podría ser superavitario en más de 25.000 millones de dólares anuales.
Para afianzar resultados no solo será vital la caída en las importaciones por menores precios, caída de la demanda interna por recesión y mayor capacidad de transporte de producción local, sino también las crecientes exportaciones de petróleo. Las empresas esperan una liberación casi plena del mercado y la pronta llegada de los precios locales a la paridad de exportación para vender sus excedentes al exterior.(Clarín).