El ministerio de Producción e Industria de Neuquén, continúa implementando una serie de medidas por nuevos casos de gripe aviar en la provincia. Se trata de reforzar medidas de prevención y además ponen a disposición una línea para ampliar información y realizar consultas.
En primer lugar, desde la cartera recordaron que aquellos productores y productoras que cuenten con aves en sus planteles productivos, la necesidad de aislarlas en gallineros o cualquier estructura que le permita mantenerlas protegidas de aves externas. Es necesario en este contexto, no intercambiarlas ni venderlas y procurar que no circulen por granjas vecinas.
Es de vital importancia mantener una buena higiene del lugar, evitando la acumulación de guano, y si esto ocurriera se debe enterrar las heces para evitar que otras aves tomen contacto.
También se pide evitar concurrir a lagunas o espacios verdes donde haya presencia de aves silvestres y no tocar aves muertas o que parezcan enfermas.
Para trabajar con las aves, se debe utilizar ropa y calzado exclusivos y disponer el alimento y bebida en lugares donde solo accedan las aves de pertenencia.
El Ministerio de Producción e Industria, dispuso la línea 299 548-9926 para aquellos productores y productoras que deseen ampliar información o hacer consultas sobre la temática. Además, se recordó que ante casos en los que se observen signos clínicos nerviosos, respiratorios o digestivos, o el hallazgo de aves silvestres o de corral muertas, no tocar ni manipular aves y notificar al SENASA y que el Ministerio de Salud, a través de su Dirección de Epidemiología, para que hagan el seguimiento de las familias donde se encuentra contagio en su producción.
El virus
La influenza aviar es una enfermedad de alto impacto en la producción avícola.
Es importante contar con la responsabilidad y colaboración de la población para proteger nuestra avicultura.
Se transmite de las aves silvestres a las aves domésticas (gallinas, gallos, pollos, pavos, patos y gansos) a través del contacto directo o a través del guano.
Solo se trasmite a los humanos por contacto directo al manipular aves enfermas o muertas por el virus a través de sus secreciones o excreciones. No se trasmite por el consumo de carne o huevos.