El diputado Darío Martínez (UxP), junto a sus compañeros de bloque, presentó un proyecto de ley para que empresas concesionarias contraten a Pymes o empresas neuquinas para hacerse cargo de la producción los pozos de petróleo ya maduros o inactivos, en lugar de intentar venderlas o revertirlas a la provincia. La medida apunta a mejorar la producción, aumentar las fuentes laborales locales y promocionar la actividad del sector empresarial de la región en la principal actividad productiva de la provincia.
Podrán ser beneficiarios del régimen en cuestión quienes se encuentren inscriptos en el “Registro de Empresas Petroleras del Estado Nacional” (RPPBP) que sean titulares de concesiones de explotación de hidrocarburos y terceros asociados o relacionados contractualmente a tales titulares.
El articulado estable que los beneficiarios del registro obtendrán una serie de beneficios en relación a la producción de crudo, entre ellos una reducción del 50% para regalías y canon extraordinario así como también para ingresos brutos y para el impuesto al sello, en cuanto a los contratos entre los beneficiarios y los terceros recuperadores. En tanto, adquirirán otros beneficios también en relación con totalidad de su producción de petróleo con origen en concesiones de explotación otorgadas por la provincia, 10% de reducción tanto para regalías y canon extraordinario como para ingresos brutos.
Con igual criterio, se fija el beneficio de la reducción del impuesto sobre los ingresos brutos para los “terceros recuperadores”, bajo el siguiente esquema: 100% durante los primeros dos años; 85% durante el segundo bienio; 75% para el tercero; 65% para el cuarto y 50% para el quinto bienio.
Los fundamentos explican que la vida útil de un yacimiento explotado de manera convencional tiene un ciclo de producción, que va declinando a lo largo del tiempo por razones geológicas. Sin embargo, esta manera de producir fue evolucionando con la incorporación de técnicas de recuperación secundaria y terciaria, que permiten justamente ampliar el horizonte productivo, minimizando o incluso deteniendo en algunos casos el declino, con las inversiones adicionales necesarias, optimizando la extracción del crudo del subsuelo.
Más adelante informan que en Neuquén, las áreas de explotación convencional han entrado ya en proceso de maduración, mientras que las grandes empresas centran su atención en el yacimiento Vaca Muerta y en la explotación no convencional. En ese contexto, es factible que empresas de mucha menor envergadura, utilizando técnicas apropiadas y asociadas entre ellas, puedan mejorar la performance productiva de las áreas en cuestión, extrayendo finalmente más crudo, y transformando lo que para las grandes empresas es antieconómico, en una actividad rentable y generadora de fuentes de trabajo.
“Más allá de las decisiones que estén dispuestas a tomar las empresas titulares de Áreas de Concesión, y de su conveniencia, el Gobierno de la Provincia debe velar por la más eficiente explotación integral del recurso, propendiendo a que la misma permita la mayor apropiación posibles de la renta petrolera para los neuquinos”, sostienen los autores.
El proyecto de ley (16626) ingresó por Mesa de Entradas el 10 de abril firmado por Darío Martínez, Lorena Parrilli y Darío Peralta de Unión por la Patria.