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El impacto del crecimiento de Vaca Muerta: testimonio desde el corazón de La Amarga Chica

Un apoderado de un campo describió cómo es vivir en el centro de la actividad no convencional. Reconoció el efecto en la flora y fauna de la zona y destacó la relación con las diferentes operadoras.

Ricardo Arónica, apoderado de un campo en el área La Amarga Chica, compartió su experiencia sobre el impacto del desarrollo masivo de Vaca Muerta en la región.

Arónica destacó la intensa actividad y el desafío que representa convivir con la constante circulación de camiones y camionetas en la zona.

"La gente que no conoce la actividad de Vaca Muerta debería acercarse y ver lo que sucede en Añelo y en los campos donde se desarrolla esta actividad masiva. Es increíble convivir con el movimiento constante: camiones cada 5 minutos y camionetas cada 2 minutos. Esto se va potenciando y es preocupante porque la infraestructura existente no es suficiente para el aumento previsto del 20-30% en los próximos años", comentó Arónica.

El campo de Arónica abarca varias áreas, incluyendo La Amarga Chica, y mantiene relaciones con distintas operadoras como Vista. "Las operadoras cumplen con las normativas y cuidan el medio ambiente, aunque hay imprevistos como roturas de caños que generan daños temporales. Sin embargo, hay una conciencia empresarial y una rápida respuesta para resolver estos problemas", explicó.

El intenso desarrollo de Vaca Muerta ha limitado el uso del campo para la cría de animales. "Antes criábamos más de 500-600 chivos y corderos, pero ahora solo quedan unos 100-150 debido al despliegue de infraestructuras como oleoductos, gasoductos y plantas separadoras de gas. Esto ha afectado la flora y la disponibilidad de alimentos para los animales", señaló Arónica.

A pesar de estos desafíos, Arónica mantiene una buena relación con las operadoras y ha visto el lado positivo del desarrollo. "El campo está lleno de actividad, desde el famoso tanque que transporta petróleo a Chile hasta la generación de energía con granjas de cripto. Estamos atentos a la oportunidad de poner en valor las tierras y ayudar a alcanzar la emisión cero", añadió.

El puestero del campo, Teófilo Muñoz, sigue viviendo allí con su esposa, manejando todo con energía solar. "Teófilo es una persona que nació y creció en el campo. Es un estilo de vida del que no quiere desprenderse y su experiencia es invaluable", afirmó Arónica.

La entrevista dejó en claro que, aunque el desarrollo de Vaca Muerta ha traído desafíos, también presenta oportunidades para el futuro. "Es un tema muy enriquecedor y estamos aquí para adaptarnos y sacar el mejor provecho de esta situación", concluyó Arónica.
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