El director ejecutivo de Pan American Energy (PAE), Marcos Bulgheroni, sostuvo el miércoles 1 de noviembre que los yacimientos de hidrocarburos no convencionales del área de Vaca Muerta serán "el puente" por el que la Argentina llevará a cabo el proceso de transición energética y también será "el motor regional de un mercado de gas, como mínimo, sudamericano".
Bulgheroni disertó en el marco del 13° Foro de la consultora Abeceb, en el que remarcó que la industria de hidrocarburos "se dio cuenta de que tiene que ser parte de la solución" en materia de reducción de emisiones de dióxido de carbono y que "va a poner todos los recursos" para impulsar la transición energética junto a las energías renovables.
En ese contexto, advirtió que "no existe una sola tecnología para resolver el problema" de la reducción de la emisión de Gases de Efecto Invernadero (GEI) y que plantear lo contrario "es una fantasía".
Al respecto, consideró que en el mundo la transición se llevará a cabo "con varias tecnologías compitiendo entre sí, en un sendero en cuyo final una será la predominante de una región y otra lo será en otras" y que en el caso argentino el gas no convencional de Vaca Muerta "nos va a permitir ser el puente entre lo que queremos ser y lo que podemos dar".
Al analizar el mercado energético mundial luego de la pandemia de Covid 19 y los efectos de la guerra en Ucrania, Bulgheroni señaló que se ha instaurado "un ambiente de precios más alto".
Entre las razones de ese nuevo panorama, mencionó que "China volvió a demandar petróleo y gas en cantidad después de la pandemia" y que Rusia y los países de la OPEC+ no solo "limitaron la oferta de crudo" sino también incidieron en "un cambio en el mapa de flujo", ya que sus exportaciones ya no van dirigidas a la Unión Europea sino a China e India.
Por otra parte, indicó que por el momento los efectos del conflicto en Medio Oriente "son acotados" en materia energética, pero no que se puede descartar "una disrupción" en el futuro, tanto por la oferta iraní como por los inconvenientes logísticos que podría acarrear un eventual cierre del Golfo Pérsico.
Ese cuadro de situación, manifestó, abre "una gran oportunidad a los productores no tradicionales, en particular los de América Latina" y en ese marco subrayó la importancia de Vaca Muerta, "una oportunidad que no debemos dejar que se pierda".
"Vaca Muerta va a ser el motor regional de un mercado de gas, por lo menos, sudamericano", proyectó, al tiempo que previó que en "uno o dos años", cuando concluyan las obras de transporte por el Gasoducto Presidente Néstor Kirchner y las complementarias de reversión, la Argentina podrá "brindar energía al resto de los países de la región".
Asimismo, sostuvo que de esa forma se podrá conformar "un anillo energético" con exportaciones de gas a Chile, Bolivia, San Pablo y Río de Janeiro en Brasil y Uruguay.