Las decisiones adoptadas por la compañía desde abril, en el marco de una crisis inédita generada por la pandemia, le permitieron a YPF mejorar ingresos, mantener costos bajo control, preservar la caja, despejar el futuro financiero y recuperar gradualmente la actividad, con un impacto positivo en el EBITDA que mejoró significativamente en el tercer trimestre.

“Respecto al trimestre anterior, los ingresos aumentaron un 19,5% (*) como resultado de la recuperación en las ventas de combustibles y la estabilización de la producción de petróleo y gas. La demanda de productos refinados se recuperó significativamente con respecto al trimestre anterior, impulsada por el aumento del 41% en los volúmenes vendidos de nafta y 22% en diésel, aunque todavía no se alcanzaron los niveles pre-pandemia. Los precios en el surtidor se ajustaron dos veces durante el trimestre, acumulando en promedio un incremento del 8% en pesos”, indicaron desde la empresa.

Este resultado operativo de YPF sorprendió al mercado y por eso sus acciones volaron hasta un 17,2% en el Merval este martes y cerraron con una suba del 15,4%. Los datos del tercer trimestre se dieron a conocer el martes 11 de noviembre y revelaron una reducción de las pérdidas del orden del 58,5% respecto del segundo trimestre.

La utilidad neta del trimestre fue una pérdida $35.332 millones, una ostensible mejora respecto del trimestre anterior, aunque se siguieron notando los efectos de la pandemia en los resultados económicos.

La suba no obedeció exclusivamente a la mejora en el resultado económico. La noticia se dio luego de que ayer con el anuncio de los buenos resultados de la vacuna de Pfeizer, el petróleo subiera 10%. Y sirvió para realinear las acciones de YPF que venían muy golpeados.

Es que si bien la utilidad neta fue negativa, la mejora en los ingresos y el manejo de los costos superó las expectativas del mercado que rápidamente tomó nota e hizo subir los papeles de la petrolera de bandera. En Wall Street el ADR de YPF cerró la rueda con una suba del 14,9% en 4,75 dólares, mientras que por ejemplo las acciones de Petrobras subieron 7,33% a los 8,79 dólares, detalló La Política Online.

Respecto al trimestre anterior, el manejo de costos permitió reducirlos un 19% en dólares mientras que los ingresos aumentaron un 19,5% gracias al rebote en las ventas de combustibles y a la estabilización de la producción de petróleo y gas en el orden de los 468.500 barriles de petróleo equivalente día.

Desde la compañía detallaron que "la demanda de productos refinados se recuperó significativamente con respecto al trimestre anterior, impulsada por el aumento del 41% en los volúmenes vendidos de nafta y 22% en diésel, aunque todavía no se alcanzaron los niveles pre-pandemia. Los precios en el surtidor se ajustaron dos veces durante el trimestre, acumulando en promedio un incremento del 8% en pesos".

"También, mejoró el nivel de procesamiento en las Refinerías que alcanzaron un nivel de utilización del 73% en el trimestre frente al mínimo alcanzado en abril del 47%. Cabe señalar que durante este período se realizó el mantenimiento programado en la Refinería de La Plata que había sido suspendido en abril", agregaron.

Entre julio y septiembre, se levantaron 35 equipos en las provincias de Chubut, Mendoza, Neuquén y Santa Cruz en acuerdo con los sindicatos y bajo estrictas medidas de seguridad para cuidar la salud de los trabajadores. Esto permitió a YPF frenar la caída de la producción, aunque en niveles por debajo de la pre-pandemia.

Finalmente desde la petrolera destacaron que, si bien las inversiones se mantienen bajas respecto al mismo período del año anterior, se comenzaron a recuperar a medida que se fue retomando la producción. "Trimestre contra trimestre, las inversiones crecieron un 72,2%en dólares", detallaron.