Por Darío Hernán Irigaray
En los tiempos que vivimos es necesario ser creativos, buscarle la vuelta. Que mejor que escuchar a quienes llevan vivido muchos años de experiencias frente a sus empresas, peleándola como campeones, como líderes motivadores de la tropa, y hoy se enfrentan a una nueva y difícil lucha.
Dante Scantamburlo, dirige una cadena de pinturerías desde 1992, Dante Pinturerías, se especializó en pinturas industriales para la industria hidrocarburífera, cuenta con seis sucursales y cerca de 40 empleados.
Hoy con una actividad casi nula, apuesta a capacitaciones junto a su personal, utilizando plataformas digitales de video conferencias como Team o Zoom, realiza charlas constantemente, apostando a la mejora continua, mejorando los stock y puntos de pedidos. También realizan charlas técnicas con proveedores de productos para poder lograr una mejor satisfacción de sus clientes.
“Fundamentalmente nos sirve esta etapa para pulir detalles y mejorar, y ver cómo vamos a hacer cuando esto se reactive. Estamos expectantes, sabemos que no será un camino fácil, que tenemos que emprenderlo con seriedad y con responsabilidad, cuidando a las personas que trabajamos, con buena salud”, señaló Dante.
“Lo importante es tenerlos activos, en cuanto a que estén viendo que podemos hacer para cuando volvamos a trabajar activamente, este tiempo nos haya servido, para capacitarnos más, para ver en que estábamos fallando, como mejorar, como relacionarnos mejor con nuestros clientes, eso es fundamental”, finalizó con un gran espíritu optimista.
Silvia Harguindeguy dirige la Agencia de Viajes Las Bardas en Neuquén hace 28 años, reconoce que vivimos un momento “raro” y su actividad hoy se reduce a cero.
“Tenemos que ser un poco más comprensivos, mas reflexivos, así entre todos nos vamos a poder ayudar”, afirmá la titular de Las Bardas, invitando a “pensar cómo vamos a sobrevivir”, autodefiniéndose como una empresa creativa, asegura “que de alguna manera le vamos a encontrar la vuelta”.
“Soy optimista que esto en algún momento va a mejorar, va a cambiar, el mundo va a ser otro, probablemente lo más afectado es lo económico, nadie sabe que tiene que hacer o como hacer”, lo importante es seguir haciendo lo que uno sabe hacer y lo que puede en esta situación, se resume del relato de Silvia.
Por medio de publicaciones regulares en la red social Facebook, Silvia relata experiencias de los viajes desde los sentimientos y emociones vividas, de momentos únicos, más allá de una foto. “En este momento trato de transmitirle a mis pasajeros, para que puedan tener una ilusión, un proyecto, rememorar un momento único, la risa, habernos divertido, haber compartido una charla, una comida, un vino, un paisaje
”.
“Lo que estamos tratando es de hacer un aporte desde lo emocional. Hay mucha gente sola. Y lo que no hay en este momento es cosas lindas a las que uno se pueda aferrar”, indica con gran calidez humana.
“Por un lado está la pandemia, y por el otro está el miedo, que es algo irracional. No sabemos cómo vamos a proceder. La vida va a seguir, va a continuar, y lo que hay que tener es un proyecto, aunque sea pequeño. Esto termina, ¿qué voy a hacer? ¿Qué me gustaría hacer? Reunirme, una fiesta, ir a trabajar, ir al supermercado, hacer un baile, algo, un pequeño proyecto. Tenemos que tener un pequeño proyecto, para el día después, si no, nos vamos a morir de miedo”, finalizó muy optimista.
Lo cierto, en momentos de incertidumbre e indefiniciones, lo mejor es tener la mente ocupada con pensamientos positivos, y proyectos que se puedan concretar a corto y mediano plazo.