El CEO de Tecpetrol, Carlos Ormachea, CEO de Tecpetrol, piensa que el gas de Vaca Muerta puede modificar el tablero de la matriz energética del país y derramar hacia toda la economía nacional.

El megaproyecto que lleva adelante la compañía del grupo Techint en Fortín de Piedra -cerca de Añelo-, promete sumar por sí solo el 17% del gas que produce Neuquén, en apenas 18 meses. La agresividad de la inversión, que contempla etapas de 70 millones de dólares mensuales, tiene el objetivo de tomar la oportunidad que ofrece la formación no convencional de primera mano.

Para lograr este objetivo, el grupo Techint prevé invertir u$s 2.300 millones en los próximos dos años. El proyecto promete duplicar la producción de gas antes de fin de año a 1,5 millones de m3/día y llevarla a 5 millones m3/dia en los primeros meses de 2018.

“Vemos una demanda insatisfecha en la región. Y particularmente en Argentina que se concentra en el gas, estamos importando todos los años en cantidades significativas a precios relativamente altos (para GNL), por eso vemos ahí una oportunidad de sustitución para los que lleguen primeros”, explicó Ormachea en una entrevista exclusiva con el diario “Río Negro”.

El directivo fue más allá y señaló que está confirmado que Vaca Muerta es un recurso “de clase mundial, esto significa que es abundante y de muy buena calidad”. Agregó que la producción no convencional no puede “conformarse” con reemplazar la importación, sino que por el contrario podría ser “una fuente de energía para el Cono y eventualmente pensar en volver a exportar masivamenta gas”.

Para Ormachea la oportunidad es real, pero para materializarla considera que todavía hay pendientes algunos desafíos como el mercado de consumo del gas y bajar los costos. En ambos casos considera que se necesitan inversiones que deberán llegar también desde afuera de la industria.

Para el CEO de Tecpetrol hay cuatro aspectos sobre los que trabajar para mejorar los costos. La eficiencia de los recursos para evitar los tiempos muertos en las operaciones; continuar el camino de la mejora de la productividad laboral iniciada con la adenda; la mejora de la logística, donde entiende que necesitan significativas inversiones sobre todo en el transporte terrestre y conseguir la licencia social para operar sin conflictos.

En cuanto al transporte del gas sostuvo que hay inversiones que tendrán que hacer otros. “Es mucho el volumen de materiales que se mueven hacia la operación y después será un volumen enorme del gas que salga hacia los centros de consumo. Se necesitan inversiones en puertos, ferrocarril, caminos, vivienda, gasoductos e inversión en midstream”.

Una parte de esos desembolsos llegarán desde las petroleras, pero agregó que habrá “otros tipos de inversiones en los que la presencia del Estado va a ser ineludible. Sin embargo hay una oportunidad muy grande del sector privado también”.

La clave para el equipo del grupo Techint es llegar hacia el final del sendero de precios (nuevo Plan Gas), que Nación fechó en 2021, con un valor para el gas que esté por debajo de los 4 dólares (el plan del gobierno finaliza en 6 dólares).

“Nuestro problema no es la falta de gas, ese es el problema que teníamos hace cuatro años. Tenemos un escenario que ha cambiado radicalmente. Hoy la pregunta es dónde vamos a poner todo el gas que produzcamos”, señaló.