Desde la explosión de Vaca Muerta y su localidad de cabecera, la población se triplicó. Los principales desarrollos urbanos se están dando en la meseta, en el sector denominado Nuevo Añelo y desde la municipalidad está estudiando la implementación de un servicio de transporte urbano de pasajeros para recorrer distancias que cada vez son mayores.

En la meseta hay más de tres desarrollos en marcha y se prevé que vivan unas dos mil personas. Las distancias son largas y en el invierno se complica. Es por eso que los vecinos ya solicitan un colectivo que una los nuevos barrios con las escuelas, el municipio y el banco.

El Municipio está elaborando la ordenanza del nuevo transporte público, aunque todavía no sabe bien cómo será el pliego, la cantidad de micros, si serán combis y el valor del boleto. “Queremos cerrar este tema durante este año para mandar la ordenanza. El emergente demográfico de Vaca Muerta no solamente se generó en el ámbito del transporte, hoy la coyuntura de la actividad petrolera no es la misma. Tuvimos un momento de estabilidad y estancamiento, pero los nuevos anuncios están moviendo nuevamente el esquema de la realidad del pueblo”, expresó Marcelo Venegas, secretario de Gobierno de la Municipalidad de Añelo al diario LM Neuquén.

El nuevo sector urbanizable de la ciudad se desarrolla el sector norte de la Ruta 7. Ahí está el barrio La Esperanza, Loteo Social (140 lotes) y Nuevo Añelo, a unos 2 kilómetros de casco céntrico

En la actualidad hay una empresa, Transportes Rincón, que llega desde Neuquén, Centenario y San Patricio del Chañar a la localidad de Añelo. Es un servicio interurbano que no reemplaza el pedido que hacen los vecinos de contar con un colectivo de recorrido interno.

Hasta el 2013, Añelo contaba con un perfil de pueblo criancero, a pesar de los yacimientos en los alrededores. Luego del acuerdo Chevron-YPF, Loma Campana se transformó en el yacimiento estrella de la formación Vaca Muerta. Hubo una explosión demográfica y de trabajo y vino gente de todo el país a buscar trabajo, lo que generó una burbuja económica, en donde el kilo de pan llegó a costar $50 en el año 2014. Incluso hubo vecinos que alquilaron sus casas y se mudaron a otra ciudad, como El Chañar o Centenario y decidió vivir de las rentas.

La baja internacional del crudo generó un parate en 2016. Muchos se fueron de Añelo y quedó la promesa de ampliar los servicios de cloacas, agua y electricidad a los nuevos barrios del poblado.

Extraoficialmente, 7500 habitantes residen en Añelo luego del boom petrolero impulsado por la explotación de yacimientos no convencionales. Si bien los datos son extraoficiales, los números que maneja el Municipio son que de 2013 a 2015 la población se incrementó en ese porcentaje. Con anterioridad, el pueblo tenía 2500 habitantes y el incremento poblacional implicó que Añelo necesitara una nuevo hospital, una comisaría, jardines de infantes y loteos en el sector norte, contra la barda.

Otro de los proyectos que quedó en suspenso con el parate petrolero fue el desarrollo del Parque Industrial. Sin embargo, la iniciativa sigue latente y más de 50 firmas están asentadas y funcionando, sobre un total de 117 convenios que firmó la Municipalidad de Añelo con empresas operadoras, de servicios petroleros y especiales.

El parque se ubica arriba en la meseta, a la vera de la vieja ruta hacia Rincón de los Sauces, en unas 250 hectáreas. Todas funcionan a través de energía con generadores con un alto costo mensual, sobre todo para las empresas más pequeñas.

Sucede que la obra denominada Estación Transformadora Loma Campana 132/33/13.2 kilovolts -aportará una potencia de 15 MVA- aún está en construcción.

Entre las compañías asentadas figuran Schlumberger, Halluburton, Oil y Baker Hughes y San Antonio, entre otras. Además del parque industrial municipal, existen otros dos parques en proyección: uno del gobierno provincial y otro privado, denominado San Benito.

Actualmente, la localidad espera otra ola petrolera, de acuerdo con los u$s 5 mil millones de inversión previstos por las principales operadoras que hay en la cuenca neuquina, algunas de las cuales ya han sido adelantadas por el gobierno de Neuquén.