La crisis del sector hidrocarburífero no solo pone en riesgo las inversiones de las empresas y los empleos de los trabajadores, sino que también repercutió en la Universidad Nacional del Comahue (UNCo), donde se registró un 40% menos de preinscriptos en la carrera de Ingeniería en Petróleo.

La UNCo es una de las cuatro universidades públicas que ofrecen esta carrera en Argentina, junto con la Universidad Nacional de Cuyo, la de la Patagonia San Juan Bosco y la Universidad Nacional Arturo Jauretche, que se sumó recientemente y suele convocar a estudiantes de distintas localidades y hasta de otras provincias y de países limítrofes, que llegan a la ciudad por su interés en trabajar en el rubro.

Según los datos de la preinscripción registrados por la Secretaría Académica de la UNCo, 105 personas iniciaron los trámites para comenzar a cursar la carrera en 2017. En la misma instancia de preinscripción pero para el ciclo 2016, los anotados eran 175, lo que representa una caída del 40%, consigna una nota del diario LM Neuquén.

Desde el área de Orientación de la universidad aclararon que las estadísticas aún no son absolutas y que recién en marzo se conocerá realmente cuántos estudiantes iniciarán esta disciplina en el nuevo ciclo lectivo, ya que durante febrero se inscriben todos los alumnos que aún adeudan materias del secundario.

La crisis del petróleo y la incertidumbre en cuanto al futuro, también repercutió en las búsquedas laborales, que tuvieron una caída interanual de búsqueda de puestos petroleros en los clasificados de los diarios regionales, según datos de la Dirección Provincial de Estadísticas y Censos registrados en agosto.

Con estas cifras, la disciplina cayó cinco lugares en el ránking de las carreras más elegidas de la universidad, donde Medicina se mantiene en el primer puesto. Esta ingeniería fue la séptima más elegida para el ciclo 2016, pero quedó en el 12º puesto para este año.

En cuanto a las carreras de Ingeniería, la de petróleo dejó de liderar el podio en la facultad. Mientras que el año pasado fue la orientación de ingeniería más elegida, este año fue superada por Ingeniería Civil, con 131 preinscriptos, e Ingeniería Química, con 116.

El plan de estudios solía ser uno de los principales atractivos ya que muchos jóvenes se acercaban tentados por las posibilidades laborales que ofrecía el rubro en la provincia, así como por los altos salarios que le dieron aún más renombre a la actividad. Sin embargo, la crisis del sector parece haber funcionado como un desmotivador.

La carrera -como casi todas las ingenierías- es una de las más difíciles dentro del amplio espectro académico que ofrecen las universidades, tanto públicas como privadas y su dificultad se ve reflejada en el alto nivel de deserción que hay en la carrera en el primer y el segundo cuatrimestre. Es que además de tener mucho interés y vocación por ser ingeniero, también es necesario contar con muchas horas de dedicación al estudio en materias denominadas “duras”, como la física y la matemática.

La secretaria académica de la UNCo, María Alejandra Minelli, aclaró que en muchos casos los estudiantes optan por una carrera basados en influencias externas, como las elecciones de su grupo de amigos, las presiones de su seno familiar o el estado del mercado laboral a la hora de tomar la decisión.

Por eso, agregó que desde la universidad se trabaja durante todo el año en actividades de orientación vocacional para que los estudiantes elijan una disciplina apoyándose en sus talentos, sus intereses y sus aptitudes.

Otra carrera relacionado con el ámbito petrolero es la Licenciatura en Ciencias Geológicas que incluye el trabajo en los yacimientos dentro de su perfil profesional, además de ingresos salariales muy tentadores para jóvenes que recién salen al mercado laboral.

Aquí también se sintió un declive, que registró 19% menos preinscriptos en la comparación entre diciembre de 2015 y el mismo mes de 2016. La nómina pasó de 119 a 96 alumnos interesados.

Aunque la carrera tiene numerosas aplicaciones, en la UNCo suele estar más orientada hacia los hidrocarburos por la cercanía geográfica con los yacimientos y la posibilidad de hacer estudios de campo.